miércoles, 29 de junio de 2011

Game of Thrones 1x10: Fire and Blood

Como decía George R.R. Martin en Festín de cuervos "Este ha sido jodido".

Ha llegado el momento de la última review de la primera temporada de Game of Thrones, ahora que ya esta el cadáver frío y a nadie le importa ya quién fue su asesino vengo yo, cual ave de carroña, y lo destripo. No sé a vosotros pero a mí este capítulo me dejó mal sabor de boca, y los lectores del libro os debéis hacer una idea del porque. En efecto, esa última escena donde nacen los dragones no me ha convencido nada. Bueno vamos a ir paso por paso.

Después del final de Baelor el nivel estaba por las nubes, porque la decapitación de Eddard Stark es, quieran o no quieran admitirlo, el verdadero clímax de Juego de Tronos, donde todo lo que se ha ido sembrando durante la temporada revienta de forma cruelmente magistral. Y claro eso nos deja con un capítulo final en que se vuelven a colocar todas las fichas en el tablero para prepararlas para la segunda temporada. Un capítulo en que creo, que no ha faltado ningún personaje por decir la suya, incluso el Gran Maestre Pycelle ha tenido su propia escena en que vemos que aun aparentar ser un viejo débil aun puede dar trotes (o recibirlos) en la cama, ¿es que no hay nadie de fiar en Desembarco del Rey? Pues no.


Arya es rescatada por Yoren, que promete llevarla a Invernalia haciéndola pasar por un chico huérfano en su séquito hasta el Muro. Sansa, por su lado, no tiene tanta suerte. Es retenida en Desembarco del Rey como rehén y su compromiso con Joffrey sigue vigente, pero ya no le hace tanta ilusión después de descubrir que su príncipe azul en realidad es un psicópata que ordena a sus hombres que la peguen por él. Ha llegado el momento en que Sansa despertará por fin y verá la crudeza del mundo real, pero para eso deberemos esperar a al segunda temporada.

La noticia de la ejecución de Lord Stark golpea con fuerza al ejército de Robb, pero en vez de derrumbarse se hacen más fuertes y deciden que ha llegado el momento de volver a los viejos tiempos en que el Norte era independiente y proclaman a Robb The King in the North. La tentación de matar a Jaime Lannister ahora es más grande, pero su muerte solo serviría para aumentar la ira de los Lannister y provocar la muerte de Sansa. Tendrán que jugar bien la carta que tienen.

En el ejército enemigo la noticia tampoco es recibida con los brazos abiertos. La muerte de Eddard Stark hace imposible la paz, por ahora, en Poniente, así que Tywin decide enviar a Tyrion a ocupar su lugar como Mano del Rey, ya que él está ocupado comandando el ejercito. Tywin sospecha que el Consejo está lleno de traidores o imbéciles por haber permitido que el niño rey ordenara la muerte de Ned, así que confía en Tyrion para que sepa poner orden.


En el Muro también llega la noticia y Jon no duda en huir y unirse al ejercito de Robb para vengar la muerte de su padre. Menos mal que ahí están sus Hermanos Negros para hacerle volver entrar en razón y es que quizás en Poniente se este librando una guerra, pero la amenaza que hay Más-allá-del-Muro es mucho peor, así que lord Mormont reune a un centenar de hermanos de la Guardia de la Noche y se lanzan a la búsqueda de Benjen Stark.

Finalmente al otro lado del Mar Angosto Daenerys ve el precio que ha tenido que pagar por la vida de su Sol y estrellas, la vida de su hijo nonato, que según parece lo que llegó a salir de sus entrañas no era siquiera humano. Por si fuera poco Mirri Maz Dur le entrega un Khal Drogo en estado vegetal, la muy bruja se la ha metido doblada. Daenerys, destrozada, ahoga a Drogo con la almohada para que reciba el descanso que se merece y acto seguido monta una pira para que ardan todos: Drogo, la maegi, ella y todas sus posesiones. Cuando se levanta el Sol y la pira se apaga, para sorpresa de todos, Daenerys sigue intacta y rodeada de tres dragones nacidos de los huevos de dragón que le regalaron en su boda.
Y es aquí donde tengo que meter baza, y es que ese corte de escena cuando Daenerys se mete en la pira me ha parecido horrendo, por no decir lo poco coherente que es que todo el khalassar se quede dormido mientras Daenerys está allí metida (sin quemarse) y los dragones salen de su cascarón. ¿Pretenden decirnos que los dragones tardaron una noche entera en nacer? Sigo pensando que la versión del libro es infinitamente mejor, donde todo el khalassar ve como nacen los dragones entre las llamas y rodean a una Daenerys sin cabello (porque obviamente se le ha quemado) y más impresionante que nunca (es la imagen de la portada del segundo libro por si alguien tiene curiosidad).

También quiero destacar un par de escenas más, como la escena de Cersei al recibir la carta que anuncia la captura de su hermano donde descubrimos que se está tirando a su primo Lancel (y que curiosamente fue nombrado caballero después de la muerte de Robert), eso si que es amor por la familia y no el de Vito Corleone. Y también hay que destacar la escena en que Varys y meñique hacen un último enfrentamiento verbal mientras observan el Trono de Hierro con ojos golosos (estos dos si que acojonan y no los dragones).


Mejor escena: Aunque me haya decepcionado sigue siendo la escena del capítulo: Daenerys con sus dragones.

Mejor interpretación: Khal Drogo. ¡Brutal haciendo de vegetal! Nah, en serio, Emilia Clarke.

Mejor frase: El chillido final del dragón.

1 comentario:

  1. Con ganas de ver como sigue la historia, antes de que mi mujer me haga spoilers.

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