No todo son escenas dramáticas, Lost también destaca por escenas que nos hacen sonreir de alegria. Un claro ejemplo es el momento en que Hurley decide desafiar a su suerte y poner en marcha una furgoneta que hace años que no "chuta" bajando a toda leche por una colina:
Aún recuerdo la emoción que sentí cuando la furgoneta reaccionaba y se ponía en marcha el cassette con la canción "Road to Shamballa". La cara de alegría y sorpresa de Hurley y Charlie, el "Son of a bitch" de Swayer y el "Huuurleeeyyy!!" de Jin, ¡Ah! Y como no, Vincent correteando por ahí. Una escena que en cualquier otra serie habría pasado como una más en Lost se convierte en una de las mejores. Y es que.. después de tanto misterio, suspense y dramatismo, una escena como esta se hace notar y mucho.
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